Nuevos procesos tecnológicos para facilitar los procesos de análisis

¿Qué importancia tienen los laboratorios en la industria de los alimentos?

Actualmente, todas las empresas dedicadas al mundo de los alimentos deben de realizar análisis y controles de calidad de sus productos. Aquí es cuando un laboratorio entra en juego. Estará capacitado para asesorar y analizar todo lo relacionado con la bioseguridad.

Los análisis de alimentos son la mejor manera de evitar infecciones e intoxicaciones alimentarias. Con este tipo de análisis podemos garantizar a los productos los mejores controles de calidad a los productos de esta industria.

Estos controles se llevan a cabo mediante la toma de muestras, investigación a partir de superficies, materias primas y productos que se trasladan al laboratorio para su debido análisis.

Aspectos como la microbiología industrial, control de materias primas, cromatografía, monitoreo, vida útil de los alimentos, son solo algunos de los muchos aspectos que los laboratorios de los productos alimenticios abordan en su día a día.

Además, están especializados en temas de BPM, HACCP y controles de calidad; por otro lado, su tecnología de alto nivel está diseñados para asesorar a productores, importadores, exportadores, y en general, a empresas del ámbito industrial. También cuentan con una parte nutricional en la que determinan qué nutrientes son beneficiosos para el consumidor.

Tipos de laboratorios

Una de las actividades que estos tienen que llevar a cabo es el análisis de contaminantes en alimentos y en el agua de nuestro día a día. En concreto, se encargan de realizar el control analítico de estos productos para que sean aptos para su consumo.

Estos laboratorios cumplen con una serie de requisitos técnicos e higiénicos para poder ejercer este control analíticos en la industria; así como una evaluación de calidad de sus ensayos para determinar la validez de estos.

De este modo, hay unos cuatro laboratorios diferentes, que son los siguientes:

  1. Laboratorios autorizados: se incluyen aquellos laboratorios que se encuentren en industrias alimentarias y realicen análisis de sus propios productos.
  2. Laboratorios autorizados para autocontrol analítico: se incluyen aquellos laboratorios que realicen la actividad de autocontrol analítico a otras empresas de la industria de los alimentos.
  3. Laboratorios acreditados por la entidad de acreditación: se incluyen aquellos laboratorios con parámetros acreditados.
  4. Laboratorios autorizados en el control oficial: se incluyen aquellos laboratorios que pertenecen a las administraciones públicas que estén acreditados por la entidad de acreditación.

Los avances tecnológicos en la industria alimentaria

La preocupación por la seguridad alimentaria es un tema muy recurrente entre los consumidores y distribuidores los cuales reclaman una mayor transparencia en el origen, proceso y desarrollo de los alimentos.

La tecnología es un fiel aliado cuando se trata del control de la industria alimentaria y especialmente de la innovación. La tecnología de los alimentos está en continuo crecimiento y se encarga de desarrollar nuevas formas de creación, packaging y almacenamiento de productos.

  • La robótica desempeña un papel fundamental en la industria alimentaria. Debido a que la automatización de los procesos de producción es cada vez más frecuente, existen robots que se encargan de funciones como mover objetos pesados y otros que realizan tareas más especializadas como cortar verduras o empacar productos. Esto hace que aumente la eficiente y disminuye el riesgo de contaminación.
  • La bioimpresión en tres dimensiones (3D), se encarga de producir alimentos a través de un ordenador y puede producir alimentos personalizados.
  • Las técnicas de procesamiento son unas nuevas técnicas más eficientes energéticamente para poder conservar la forma y la calidad de los alimentos. Esto puede ser el procesamiento de alta presión que se emplea en la pasteurización y esterilización de los productos.
  • Las tecnologías de microencapsulación y nanoencapsulación están favoreciendo la creación de alimentos con nuevas propiedades, con ingredientes funcionales e introduciendo aditivos. Ambas tecnologías están siendo claves para el desarrollo de estabilizadores de producto, ingredientes funcionales, aditivos naturales e ingredientes avanzados.

La tecnología también ayuda a preservar el medio ambiente y cada vez son más los consumidores que se preocupan por los materiales y desechos que empleamos en nuestro día a día y que materiales como el aluminio son poco sostenibles.

En este caso, el avance tecnológico y la robótica están encontrando alternativas al plástico y otros envoltorios no sostenibles.